viernes, noviembre 22, 2024
Experimento Social

Conmemoración del aniversario del primer consejo de comadronas de San Pedro la Laguna

El primer consejo de comadronas de San Pedro la Laguna, Nim Alaxik, conmemoró su primer aniversario. Durante la actividad se informó a las comunidades sobre los aportes que se realizaron en 2021, como la atención en salud, terapia a mujeres, entre otros servicios, los cuales fueron posibles gracias al conocimiento ancestral aplicado.

Nim Alaxik es un movimiento nacional de abuelas comadronas que nació en 2010 y se fortaleció en los años 2016 y 2017.

El movimiento surgió cuando comadronas mayas, kaqchikeles, k’iché, tz’utujiles y mam compartieron sus experiencias sobre el servicio que brindan a familias y comunidades del país. A su vez, se dieron cuenta que compartían la preocupación por que su trabajo era discriminado y perseguido por algunas de las autoridades del sistema de salud. Esta razón las llevó a organizarse por consejos departamentales. El movimiento Nim Alaxik inició con representación en cinco departamentos y, en 2022, tiene representación de mujeres comadronas en los 22 departamentos Guatemala.

La secretaria nacional de la Senacyt, Ana Chan, y el equipo de la vicepresidencia de la República, participaron en la conmemoración del aniversario del primer consejo de comadronas de San Pedro la Laguna, donde presentaron la estrategia de inclusión de mujeres y pueblos indígenas en la ciencia, la tecnología y la innovación, con el objetivo de reconocer los saberes ancestrales y su aporte al desarrollo de Guatemala. Esta estrategia también busca promover mayor participación e inclusión de las mujeres en la ciencia, además de incentivar, desde la niñez, la adolescencia y la juventud, vocaciones científicas y tecnológicas.

“Sabemos que los pueblos indígenas, con su cultura milenaria, han aportado a la humanidad un cúmulo de conocimientos y prácticas que han sido de utilidad para nuestro diario vivir. Los conocimientos tradicionales se han generado a raíz de la convivencia entre el ser humano y su entorno, una convivencia armoniosa y con respeto. Estos, además, son saberes que se han construido de una manera colectiva, transmitiéndose de generación en generación. Los conocimientos tradicionales también son ciencia, probablemente con sus diferencias y sus similitudes con la ciencia generada desde el mundo occidental, por lo que pueden y deberían ser complementarias”, destacó Ana Chan, secretaria nacional de la Senacyt.